Capítulo 26

Bill y tú entraron, acompañaron a Fran hasta la cocina a buscar palomitas [cabritas], papas fritas, bebidas y gomitas mientras ella dejaba la película en manos de Georg y volvía con ustedes. Luego subieron veloces cada peldaño de la escalera, ahí estaba el castaño sentado con la película en pausa esperándolos.
-¡Hola hermano! — Sonreíste y dejaste un beso en la mejilla de Georg. — ¿Has logrado soportar a Fran? — cuestionaste divertida mientras Fran te fulminaba con la mirada.
-Claro que sí jajá, ha estado un poco irritante pero bueno — se encogió de hombros haciendo una mueca con la rostro de “no importa” — es lo que hay.
-¡Georg! — Alegó la castaña dándole un leve golpecito en el hombro el bajista.
-Georg — llamó su atención el vocal — me llamó David.
-¿Qué quiere ahora?
-Nos vamos mañana en la mañana — respondió Bill sacando un par de palomitas.
-Georgi — exclamó Fran haciendo un puchero — no quiero que te vayas. — lo besó tiernamente recostándose en su regazo.
-Pero… tú sabes cómo es esto de ser músico — le acarició el rostro.
-¿Saben? Veamos la película, es mejor — pusiste play y te recostaste con Bill.

---
Un grito muy agudo, y la misma persona dio en salto para quedar de pie sobre el sofá-cama, apuntó la pantalla.
-¿Para qué gritas? — preguntaste mirando a tus espaldas, ya que esa persona estaba ahora escondida tras tuyo.
-Es que… de eso. La muy idiota sabe que no tiene que entrar ahí.
-Les dije que no era buena… — Bill no terminó la oración ya que otro chillido lo irrumpió —…idea ver una película de terror con Georg.
-Jajá, hija de puta, ya estaba bueno que se comieran tu cabeza. Oh mierda, a ella no, ¡está embarazada! — dijo aferrándose aun más de tu espalda.
-Lo sé, pero quería verla, no valió la pena, no es buena — le dijiste a Bill besándolo. Cuando en la pantalla se ven grandes letras rojas: “THE END?”
-¡¿QUÉ?! ¿No murió? Pero si yo juraría que… ¡ah! — gritó molesto el castaño. — película de mierda barata.
-Tranquilo Georg — dijiste entre risas mientras Fran sacaba el cd.
-Sí — reafirmó Bill cuando se dio cuenta que la película había acabado y Georg no te soltaba — y deja a mi novia, la tuya está al lado, jum.
-Ya señor celoso — rió el bajista, contagiándonos de su pegajosa alegría. — No es mi novia. Aún.
-Mmm… amor — te llamó Bill.
-Dime.
-Ya es… tarde. ¿No crees que deberíamos ir a un hotel?
-¿Cómo? Quédense aquí — sonrió Fran, jalándote del brazo hacía una habitación.
-¡Me voy a caer! — hiciste un puchero, Fran rió y negó con la cabeza. — Billo, ayúdame amor — Estiraste tu mano para que él la alcanzara.
-Ya voy — respondió el pelinegro soltándote de la castaña, esta última los fulminó con la mirada y soltó.
-En esa habitación dormirán, Georg y yo dormiremos en la mía. Cualquier cosa no estoy. — entró en su cuarto con Georg. Te alzaste de hombros y arreglaste el sofá-cama para guardarlo, Bill te ayudó y Fran sacó la cabeza por su ventana. — lo olvidé, no incendies nada.
-Pero Fran — le debatiste.
-¿Perdón? — te miró desafiante, ambas rompieron a reír y ella cerró la pequeña ventana. Bill y tú fueron a al dormitorio, era bastante espacioso, pero la cama era individual, por lo que ambos dormirían muy juntos. Cuando Bill estaba durmiendo decidiste enviarle un mensaje a tu mamá, buscaste en la mesa de noche y encontraste el aparato.
Menú - Mensajes – Crear uno nuevo.
‘Mamá me quedó en la casa de Fran, no quiero ver a ese idiota otra vez.’
-Mmm… no. — lo borraste y seleccionaste.
Opciones - Crear uno nuevo.
¿Desea guardar en borradores? Sí – No.
-Mmm…
No.
‘Mamá, esta noche dormiré con Bill en casa de Francesca (sí, la chica alta de la calle cerca a la tía) No estoy enojada contigo, sino con…’
Te costó escribirlo, pero para no sonar inmadura lo pusiste.
‘…papá. No debía hablarme así ni menos degradar a Bill por su forma de vestir, espero que se dé cuenta. Te amo.’
-Mejor.
Opciones - Enviar.
Ingresar número - Opciones - Buscar en agenda.
M - Mamá.
Enviando…
Dejaste el celular sobre la mesita de noche y un pitido sonó débil, pero en comparación con el silencio de la sombra despertó a Bill.
Mensaje enviado satisfactoriamente.
-¿Qué haces mi vida? — se aferró a ti besando delicadamente tu cuello.
-Nada, sólo… le avisaba a mamá que estábamos acá, es todo.
-¿Niña buena?
-Sí. — sonreíste.
-No te creo.
-¿Amh? ¿Por qué no?
-Conmigo en la cama no eres buena. — Suspiraste. — eres malvada.
-Bill.
-No sólo en la cama. También en la ducha…
-Bill.
-En el sofá. — enumeró con los dedos.
-Bill.
-En la cocina igual.
-¡Bill!
-Dime — sonrió.
-Dos cosas. Primero: tú me haces mala — mordiste tu labio sensualmente. — Y segundo: Igual te gusta, así que no alegues.
-No alegaba.
-¿Entonces?
-Recordaba momentos placenteros.
-Mejor duérmete — lo besaste y ambos cerraron los parpados intentando conciliar el sueño…

Jeje, espero que les guste mucho el cap ,me parece que la devon me está llamando, así que las dejo. Besos. Comenten.